Bueno, bueno, bueno, este taller fue un tanto especial, os cuento.
En verdad el taller estaba anunciado como lo veis en el propio cartel, pero no era fácil que surgiese grupo. 20 de agosto, viernes, verano, Estaciones Sonoras…
Efectivamente, no salió grupo, pero como yo andaba por allí y esta peñita guapa, que es la mía, quería un taller sí o sí, pues nada, dicho y hecho. Lo único que hicimos fue trasladar la hora porque como os decía antes, era un viernes, laborable. Un viernes en agosto, o estás fuera de vacaciones o trabajas, así que lo hicimos a las 19.00.
Siempre voy a preparar media hora antes de cada taller. Mirad con lo que me encontré…
Me encantó, flipó y requete chifló …
He de decir que me tuvieron allí 3 horas, eh? Acabé seca de tanto hablar y nada, que no se querían ir las muy perras, pero bueno, luego me invitaron a unos tragos y a cenar, así que no tuve más remedio que perdonarles, jajaja!
Esto no es trabajo, es disfrutar.
¡Maite, María, Cris, Irene e Idoia, gracias chatis! Por muchas más!